
Hace unos días tuve la oportunidad de asistir a una charla que daban en Móstoles dos militantes del movimiento libertario griego. El tema de la charla me gustaba porque la idea era que se centraran en las alternativas a la crisis, en lo que la gente está haciendo para salir adelante a pesar de Ellos, de los que engrasan los engranajes de la Máquina y ponen en hora todos los despertadores. En construir una sociedad nueva antes de que la vieja se derrumbe sobre sus cabezas. Hablaron de muchas iniciativas, y de hecho tengo pensado escribir una columna sobre ello o contarlas por aquí, pero durante la charla yo no podía parar de pensar que el Estado griego se había convertido en una organización mafiosa. Seguramente siempre lo haya sido, como todos los Estados (al fin y al cabo el Estado y la mafia surgen en el mismo lugar y en el mismo momento histórico, es deficil creer en las casualidades a estas alturas), pero el fin del Estado del bienestar está haciendo que sea más evidente. Si pagas lo que te piden, la mafia te ofrece protección de los daños que ellos mismos te causan (quemarte el local, darte una paliza, etc) y eso mismo es lo que hace el Estado. Si pagas y no cuestionas el orden existente, te protegemos de los daños que nuestra propia policía y nuestros propios jueces van a infligirte. Creo que hay una convergencia clara entre ambos tipos de organizaciones, y de hecho los grandes narcos mexicanos están construyendo una suerte de Estado del bienestar, subvencionando colegios y hospitales para ganarse el apoyo de la población. El Estado se convierte en la mafia y la mafia en el EStado. Quizá nunca fueron tan diferentes.
Con todo eso en la cabeza escribí la columna de Culturamas de este mes, os dejo el enlace por si queréis echarle un vistazo. Las charlas se están celebrando por todo el Estado, así que puede que queden fechas en vuestra ciudad si os interesa. A Madrid vuelven el 4 de febrero, pero esta semana y la que viene aún estarán de gira. Hablan muy bien castellano, el idioma no es problema.